Como expertos en el análisis de agua potable en Albacete queremos repasar el proceso que se sigue para conseguir que el agua que sale del grifo sea apta para el consumo humano.
La demanda de agua potable ha crecido de forma exponencial en las últimas décadas por lo que las depuradoras de oxidación y demás dispositivos como las potabilizadoras son cada vez más necesarios. En las Plantas de Tratamiento de Agua Potable (E.T.A.P.), el agua bruta pasa por una serie de procesos para eliminar las sustancias nocivas para la salud. Normalmente estos procesos son la regulación, la floculación, la filtración y la desinfección. En A tu Salud te recordamos que el primer proceso consiste en regular el caudal de entrada del agua a la planta para no sobrepasar la capacidad de tratamiento. En la floculación se recurre a reactivos químicos para crear flóculos, pequeñas partículas aglutinadas que eliminan algunas partículas presentes en el agua residual. En la fase de filtración se pasa el agua decantada por un lecho de arena para retener las partículas no separadas en el proceso anterior.
Por último, la fase de desinfección hace referencia al proceso de cloración, a eliminar microorganismos patógenos con cloro y derivados, luz ultravioleta y ozonización. La ozonización se emplea mucho en el tratamiento de aguas, tanto potables como residuales. Reduce el olor, el color, el sabor y la turbidez de las aguas, actúa como un potente desinfectante. Como empresa de análisis de agua potable en Albacete te recordamos que hoy día existen procedimientos muy novedosos. Todo depende del tipo de problema o contaminante detectado en el agua bruta.